El Prana y Los Mantas

Existe una estrecha relación entre sonido y prana o energía vital

Al principio de la creación, cuando el primer movimiento se hizo presente en el campo dormido de la consciencia y se manifestó la energía suprema el sonido también se hizo manifiesto. Con ese primer movimiento de la energía cósmica se manifestó también el primer sonido, el OM. Este sonido trascendental – en términos científicos – se compara con el Big Bang. 

En las escrituras sagradas se cita a la manifestación primaria de energía en la forma de verbo, y en la biblia también existe una cita que reza: “Al principio fue el verbo, y el verbo estaba con Dios, el verbo era Dios”. La primera forma del todo fue sonido, fue vibración, y se hizo presente a través  del prana o energía. Debido a la estrecha relación entre prana y vibración en el proceso de la creación el sonido es uno de los mejores vehículos para la trasmisión de energía. 

Los Mantras son sonidos cósmicos descubiertos por los yoguis en estados elevados de meditación cuando exploraban diferentes niveles de la mente para descubrir la fuente y causa de la existencia. Es muy complejo ir más allá del nivel físico en meditación porque la agitación mental es muy difícil de controlar, sin embargo los yoguis llegaron a esos niveles y experimentaron la luminosidad y la cualidad eterna del espíritu. En ese estado de consciencia escucharon vibraciones que los sentidos físicos son incapaces de escuchar. En esos niveles de consciencia supra elevados, los yoguis descubrieron sonidos y vieron muchas cosas. 

Muchas personas no entienden el poder de los mantras y creen que si ponen unas cuantas silabas juntas y las repiten eso es un mantra. Los mantras que descubrieron los yoguis son sonidos que vibran  a unas frecuencias muy particulares e identifican cada sonido con un centro psíquico particular. Algunas personas usan cualquier palabra o nombre de alguna persona o cosa que admiran o quieren como un mantra, eso es solo un sonido cargado de emoción y no un mantra cargado de prana. 

Los yoguis en sus estados alterados de consciencia observaron que los Chakras eran estimulados por el canto de sonidos particulares. Por ejemplo el mantra OM fue identificado como el sonido del centro Ajna chakra en el entrecejo, Ham para Vishudda chakra, Yam para Anahatha chakra, Ram para Manipura chakra, Vam para Swadistana chakra y Lam para Muladhara chakra. Así mismo, los yoguis combinaron ciertos sonidos a fin de generar estados de consciencia particulares. Así nacieron los mantras tales como   “Om Namah Shivaya”  u “Om Gam Ganapataye Namah”.  Dichos mantras se convirtieron en parte de las prácticas espirituales a fin de despertar distintos niveles de consciencia y desarrollar el conocimiento y la creatividad en áreas particulares de la consciencia.

Por: María Luisa Chipman