lunes, 28 de septiembre de 2015

El yoga durante el perìodo menstrual




Es muy común escuchar que durante el período menstrual de la mujer no es aconsejable practicar yoga. Pero esta afirmación no es del todo cierta, ya que de hecho, es muy recomendable practicar yoga para poder aliviar los dolores menstruales.

Durante el ciclo menstrual hay posturas de yoga que no son recomendadas ya que van en contra del trabajo que el cuerpo está ejerciendo durante esté período natural, como por ejemplo las torsiones y las posturas invertidas. Pero existen posturas que son muy recomendadas para aliviar los cólicos producidos por el proceso de la menstruación:

1. Medio Puente: fortalece la parte inferior de la espalda y masajea los órganos reproductivos. Si quieres disminuir la tensión en la parte inferior de la espalda, puedes optar por inhalar y subir las caderas y exhalar mientras las bajas. Repite 26 veces.



2. Cobra: fortalece la columna vertebral y masajea los órganos reproductivos y los riñones. Si te alivia el dolor de cabeza es debido a una mala nutrición. Si es hecho después la posición de la Media Rueda te estira completamente la columna vertebral y te activa la circulación curándote.



3. Dhanurasana: estira los órganos reproductivos y el área abdominal y la espalda. Estimula la corriente del fluido espinal. Se dice que ajusta tu humor en contrariedades.




5. Supta Virasana: Estira el abdomen, los muslos y el psoas, rodillas y tobillos, además mejora la digestión, además de aliviar el dolor menstrual. 


 6. Passchimottanasana: Estimula los órganos abdominales y el proceso digestivo, además de la circulación linfática y fortalece el sistema inmunológico.


 4. Balasana: ayuda con el dolor por cólicos en la espalda baja, ofrece relajación y alivio. 


lunes, 21 de septiembre de 2015

La vida del sadhu





El comienzo del progreso espiritual y el equilibrio mental es conocido como Sadhana. La sadhana es la práctica diaria que hace una persona, en este caso el sadhu, para corregir su mente y ejercitar su cuerpo hasta introducirlos en una disciplina para así poder expresar el infinito dentro de uno mismo.

La Sadhana se realiza antes del amanecer, antes de que salga el sol, ya que la psicosfera está menos cargada de pensamientos y nuestro aura y su irradiación prevalecen más en este momento que en cualquier otro.

Tomar una meditación como Sadhana ayuda a limpiar el subconsciente de miedos y libera nuevas reservas de conciencia y energía para que estas puedan guiarnos. A través de la meditación, la mente expulsa las nubes del miedo y ve la luz y el poder de la conciencia creativa. Por tanto, la meditación de la mañana limpia las ansiedades y proyecciones de manera diaria para que ningún miedo subconsciente sea acumulado.





Los sadhus realizan cuarentenas. Tras 40 días o un año y medio de Sadhana, la conciencia empieza a filtrarse en las partes más profundas de la mente. Los esfuerzos han echado raíces y se consolidan. La mente subconsciente recibe el mensaje. El subconsciente acepta el hábito de la Sadhana.

Los principios rectores para un sadhu son la renuncia y la disciplina. Han sacrificado toda su vida material, su familia, los placeres de la vida, para dedicarse por completo a la práctica de lo sagrado: el yoga y el control de su propio cuerpo, la meditación, rituales de distinto tipo, penitencias (en algunos casos de lo más excéntrico)…

Por eso el verdadero sadhu es considerado un hombre santo y despierta todo el respeto y la admiración en India, lo que permite que puedan vivir de la limosna.


No obstante, hay excepciones. A veces no son más que vagabundos o personas que malviven en la calle… y en algún caso es posible encontrar a quien encubre otro tipo de propósitos o prácticas bajo la apariencia de “sadhu”, como disfrazarse de atracción turística para conseguir unas rupias


Existen varios tipos de Sadhus

  1. Naga sadhus


Desnudos y con el cuerpo embadurnado de vibhuti (ceniza sagrada), 

Los naga siempre han despertado entre la gente una mezcla de fascinación y temor, y todavía hay quien piensa que efectivamente son muertos cuyo cuerpo está ocupado por el espíritu de Shiva y, como tales, hay que respetarlos. Es un mundo complejo, muy primitivo y poco conocido. 

Para un naga sadhu, tener un hijo supondría una catástrofe, pues alargaría el ciclo de reencarnaciones del que quieren escapar.


      2. Dandis



Son de origen brahman y grandes sabios. Se dedican a la meditación y conocen muy bien las escrituras. Suelen ir ataviados de un “danda”, un cayado de bambú del que no pueden separarse.


      3. Aghoris



A diferencia del resto de órdenes sadhus, los aghoris no evitan el contacto con todo lo considerado impuro, sino que lo han convertido en su razón de ser.

Los Aghori son una secta Hindú, que se ubican en la India, Nepal y Sudeste de Asia. Ellos sostienen que las personas que practican el canibalismo tienen poderes mágicos, vida eterna, y pueden relevar el dolor. Muchos hindúes los califican como “no hindúes” por tener rituales de canibalismo. Sin embargo, los Aghoris, a diferencia de otros grupos que practican el canibalismo, no matan humanos para comer, sino que comen carne humana de personas ya fallecidas. Por esto, a los Aghoris se los tilda de inofensivos.

Los Aghoris siguen a Lord Shiva y otros a Lord Kali (Kali es el nombre de su divina madre con quien se mantienen en contacto mediante rituales con cadáveres humanos, los cuales son tan sagrados como cualquier otra cosa en sus vidas) y sostienen que pueden parar el renacimiento humano en la tierra.




martes, 15 de septiembre de 2015

...Compartimos un poema que nos ayuda a recordar que lo más importante es apreciar la vida que tenemos y mantenernos en el momento presente con los pies bien firmes en la tierra. Todo momento y acontecimiento es perfecto. La vida es bella y la felicidad está en todos lados. Un poema escrito por Víctor Hugo en el siglo XIX.



" Te deseo ".

Leánlo con atención...es muy bonito.


Te deseo primero que ames,
y que amando, también seas amado.
Y que, de no ser así, seas breve en olvidar
y que después de olvidar, no guardes rencores.
Deseo, pues, que no sea así, pero que sí es,
sepas ser sin desesperar.

Te deseo también que tengas amigos,
y que, incluso malos e inconsecuentes
sean valientes y fieles, y que por lo menos
haya uno en quien confiar sin dudar

Y porque la vida es así,
te deseo también que tengas enemigos.
Ni muchos ni pocos, en la medida exacta,
para que, algunas veces, te cuestiones
tus propias certezas. Y que entre ellos,
haya por lo menos uno que sea justo,
para que no te sientas demasiado seguro

Te deseo además que seas útil,
más no insustituible.
Y que en los momentos malos,
cuando no quede más nada,
esa utilidad sea suficiente
para mantenerte en pie.

Igualmente, te deseo que seas tolerante,
no con los que se equivocan poco,
porque eso es fácil, sino con los que
se equivocan mucho e irremediablemente,
y que haciendo buen uso de esa tolerancia,
sirvas de ejemplo a otros.

Te deseo que siendo joven no
madures demasiado de prisa,
y que ya maduro, no insistas en rejuvenecer,
y que siendo viejo no te dediques al desespero.
Porque cada edad tiene su placer
y su dolor y es necesario dejar
que fluyan entre nosotros.

Te deseo de paso que seas triste.
No todo el año, sino apenas un día.
Pero que en ese día descubras
que la risa diaria es buena, que la risa
habitual es sosa y la risa constante es malsana.

Te deseo que descubras,
con urgencia máxima, por encima
y a pesar de todo, que existen,
y que te rodean, seres oprimidos,
tratados con injusticia y personas infelices.

Te deseo que acaricies un perro,
alimentes a un pájaro y oigas a un jilguero
erguir triunfante su canto matinal,
porque de esta manera,
sentirás bien por nada.

Deseo también que plantes una semilla,
por más minúscula que sea, y la
acompañes en su crecimiento,
para que descubras de cuantas vidas
está hecho un árbol.

Te deseo, además, que tengas dinero,
porque es necesario ser práctico,
Y que por lo menos una vez
por año pongas algo de ese dinero

frente a ti y digas: "Esto es mío".
sólo para que quede claro
quién es el dueño de quién.

Te deseo también que ninguno
de tus afectos muera, pero que si
muere alguno, puedas llorar
sin lamentarte y sufrir sin sentirte culpable.

Te deseo por fin que, siendo hombre,
tengas una buena mujer, y que siendo
mujer, tengas un buen hombre,
mañana y al día siguiente, y que cuando
estén exhaustos y sonrientes,
hablen sobre amor para recomenzar.

Si todas estas cosas llegaran a pasar,
no tengo más nada que desearte